jueves, 4 de agosto de 2011

VERDAD DE PEROGRULLO

A veces es más difícil dejar de hacer una cosa que empezar a hacer otra.

Y sí, se me ha ocurrido a mí solita.

7 comentarios:

  1. Muy difícil, es verdad.

    ResponderEliminar
  2. Estoy imaginando otras cosas que se te pueden ocurrir a ti solita y me divierto.

    Dejar a veces cuesta, empezar a veces cuesta.

    Una ves dajado/empezado todo sigue rodado.

    ResponderEliminar
  3. Anónimo, sí que es difícil, sí.



    Qué imaginación, Guille...
    Sí, al final lo que ocurre es que soy una vaga empedernida y todo me cuesta mucho.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Siempre y cuando, no lo deje inconcluso.
    Y nunca, si tengo que comenzar sin ganas.

    c@y@te

    ResponderEliminar
  5. ¡cuánta razón! en el fondo, somos tristes animales de costumbres... y de cosas que nunca debimos empezar a hacer

    ResponderEliminar
  6. Gracias, Pilar.
    Me ocurre poco, pero a veces tengo suerte.

    ResponderEliminar