lunes, 26 de marzo de 2012

ENZARZADA


Una puede enzarzarse en una discusión o enzarzarse a mamporros con alguien o simplemente enzarzarse en una zarza de verdad, como me ocurrió a mí y a mi pandilla de fieles amigas excursionistas  este sábado.

Quedar atrapada por una zarza no es moco de pavo, te pinchas toda, te arañas, te enganchas la ropa, el pelo y la mochila y si consigues desenredarte te llevas un bonito recuerdo. 
 

Las zarzas parecen inofensivas, incluso pueden parecerte bonitas, pero tienen muy mala baba.
No os confiéis y nunca os dejéis enzarzar por nada ni por nadie, porque lo que tiene pinchos, pincha.

3 comentarios:

  1. yo me acuerdo cuando ibamos al nido de la torre del almirante y tb caiste en las zarzas hija...claro, hay que distinguir entre enzarzarse sin querer, como lo que a ti te pasa o ...y si sales pinchada te aguantas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Y te acuerdas también de cómo, para escapar de un toro suelto, nos metimos las dos en una zarza adrede y luego no podíamos salir?
      Menos mal que el toro tiró para otro lado...

      Eliminar
    2. nosotras no jugabamos a tomar el te, verdad?

      Eliminar