viernes, 1 de abril de 2011

RAZONES OLVIDADAS

Hoy me dí cuenta de que no recuerdo por qué me quedé y que incluso he olvidado la razón por la cual no me fui.
Lo que está claro es que sigo aquí y siento que a veces un poco de olvido es refrescante.
He dejado de perseguir las razones olvidadas.

9 comentarios:

  1. Te quedaste.

    Las razones que pesaron en tu decision ya no serían el motivo.

    Ahora puedes irte o quedarte. Te tendras que basar en razones nuevas.

    ResponderEliminar
  2. Da igual. El 93.5% de las decisiones que tomamos son emocionales, osea irracionales, o sea, que da igual la razón.

    ResponderEliminar
  3. Guille, ahora tengo razones nuevas para quedarme definitivamente. ¡Espero no olvidarlas!

    ResponderEliminar
  4. Rafa, estás en lo cierto. Pensar para nada, es tontería.

    ResponderEliminar
  5. "te calzas mi corazón
    te queda grande
    somos dos muescas
    en el timón de la locura
    yo sí que estoy zafada
    por quererte
    tú sí que estás piantao
    por quedarte..."

    (sabeli ceballos, México)

    y yo te agrego una frase, de no sé quién...: no hay errores, sólo actos extraños.

    Un abrazo Helen

    ResponderEliminar
  6. Gracias, Emma. Me ha encantado tu regalo.
    Otro abrazo para ti.

    ResponderEliminar
  7. Hoy he leído una entrevista a un lama en la que decía que nos enferman los pensamientos. Mejor que no le des vueltas, Helen.

    ResponderEliminar
  8. bien hecho...a veces hay que quedarse quieta y esperar que pase algo, no buscar, no perseguir, no mover las manos ni los pies. Stop...y algo sale de repente de una chistera.
    besos
    EVA

    ResponderEliminar
  9. Te doy toda la razón. Estarse quieto es también una manera de dejar que las cosas sucedan. No hay que estar en constante persecución, que acaba una despeluchá y agotaíta.
    Besos.

    ResponderEliminar