jueves, 7 de octubre de 2010

CRUZO LOS DEDOS

Y aprieto las pestañas.
Invoco a los hados para que inclinen la balanza a tu favor.

Apretar las pestañas requiere de una gran habilidad y enorme práctica.
Sigo apretando.
Abro los ojos y los hados se han convertido en chiribitas de colores.
¿Cuánto pesa la necesidad?

2 comentarios:

  1. Gracias querida amiga cabezuda con pluma de oro.
    la necesidad no me suele pesar, pero ahora mismo sí... Q asco, no me gusta sentirme así.
    Gracias por apretar las pestañas y hasta el ojete e invocar a los hados acaramelados
    Generalmente la necesidad no deb pesarnos: No es más rico(en todos los sentidos) el q más tiene sino el q menos necesita(en todos los sentidos, también)

    ResponderEliminar
  2. De nada, por ti aprieto todo lo que haya que apretar.
    Un beso de tu amiga la cabezuda de oro.
    Muaks.

    ResponderEliminar