Qué hace que siendo una chica inteligente (e intelectual) y sabiendo, o al menos suponiendo, los ingredientes que conforman tan diabólico manjar, seas tan adicta al mismo?
Qué bien, C@y@te, así no hay conflicto de intereses: para ti los phoskitos y para mí las panteras rosas, y los bony y los círculos rojos... Tengo miguelitos de La Roda en la oficina, ¿quieres?
¡¡Y qué bien sabe la felicidad a bocados...!! Que te aproveche, Helen.
ResponderEliminarQué hace que siendo una chica inteligente (e intelectual) y sabiendo, o al menos suponiendo, los ingredientes que conforman tan diabólico manjar, seas tan adicta al mismo?
ResponderEliminarNo soy adicta, tan sólo lo disfruto cuando se me antoja. ¿Qué cuantas veces se me antoja?
EliminarMmmmm, un montón, je je.
Para eso esta el Parque de Berlín y la carrera de este domingo, para quemarlo, jejejeje.
EliminarBesos
Miguel
Hola Miguel,
Eliminarya te digo, tres o cuatro carreritas como la de este domingo y puedes comerte las panteras rosas que quieras. ¡Qué ricas!
¡Nos vemos corriendo!
Gracias, Amparo. ¡¡La gula es mi mayor vicio!!
ResponderEliminarLa pantera rosa es una pastelosa...me quedo con los phoskitos.
ResponderEliminarQué bien, C@y@te, así no hay conflicto de intereses: para ti los phoskitos y para mí las panteras rosas, y los bony y los círculos rojos...
EliminarTengo miguelitos de La Roda en la oficina, ¿quieres?
Jajaja...que arte!!!, los acepto si los acompañamos de café.
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