Ahí estoy , entre la reputación que me persigue y la que me precede....aunque lo hago por inercia, porque la que me persigue no me importa y la que me precede no es tan parecida a lo que quiero.
C@y@te, estás emparedado por tu propia reputación sin apenas importante. Eres mi ídolo. Todos deberíamos ser como tú, corriendo siempre hacia adelante e inasequibles al desaliento.
Orion, no podrías estar más en lo cierto: reputación es una palabra bien fea. Yo no la quiero para nada, pero a mucha gente le preocupa de manera exagerada.
Siempre pensé, que al llegar cualquier lugar en el que vayas a pasar tiempo, lo mas inteligente es perder la reputación el primer día. A partir de ahí ya eres libre para hacer lo que quieras. Besos Helen
Muy bien visto, Maryshelley. A partir de ahora lo tendré en cuenta y trataré de perder la reputación, buena o mala, a las primeras de cambio. Cuantos menos límites tengamos, mejor que mejor.
Sin duda...pero para mí es importante que no importe mucho "la buena reputación", no sé cómo explicarlo
ResponderEliminarPues eso, a la porra con ella.
ResponderEliminar¿Qué nos importa?
Por cierto, ayer ví Medianeras y también me encantó.
Un beso.
Primero hay que definir que es buena reputacion.
ResponderEliminarMis amigos los atorrantes tienen mi reputacion por las nubes.
Cosa que no se puede decir de las señoras de cardado pelo y misa de doce.
La buena reputación es un tostón. Las señoras de pelo cardado que sigan yendo a misa con sus maridos calvos. Yo mejor no me defino.
ResponderEliminarAhí estoy , entre la reputación que me persigue y la que me precede....aunque lo hago por inercia, porque la que me persigue no me importa y la que me precede no es tan parecida a lo que quiero.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo. ¿Para qué queremos la reputación, con ese nombre tan feo que tiene?
ResponderEliminarC@y@te, estás emparedado por tu propia reputación sin apenas importante. Eres mi ídolo. Todos deberíamos ser como tú, corriendo siempre hacia adelante e inasequibles al desaliento.
ResponderEliminarOrion, no podrías estar más en lo cierto: reputación es una palabra bien fea.
ResponderEliminarYo no la quiero para nada, pero a mucha gente le preocupa de manera exagerada.
Siempre pensé, que al llegar cualquier lugar en el que vayas a pasar tiempo, lo mas inteligente es perder la reputación el primer día. A partir de ahí ya eres libre para hacer lo que quieras.
ResponderEliminarBesos Helen
Muy bien visto, Maryshelley.
ResponderEliminarA partir de ahora lo tendré en cuenta y trataré de perder la reputación, buena o mala, a las primeras de cambio. Cuantos menos límites tengamos, mejor que mejor.
Gracias por la visita.